Día
20.
Que difícil cuando sabes la verdad de las cosas pero te da miedo
pronunciarlas y hasta escribirlas.
Sé que no va a regresar, ya lo hubiese hecho, pero no; no tengo señales de vida
terrestre y así será.
Acabo de derramar algunas lágrimas, me levante triste, con esa
tristeza pesada como la del primer día; hasta que recordé que estaba en el día
20 de su ausencia y volví a pensar en él, con odio, con amor, coraje, con
pasión...
Y es que tengo muchas ganas de
regresar el tiempo, de tenerlo a mi lado, de disfrutar cada más esos momentos,
de alargar los tiempos, pero eso ya no se puede y queda la aceptación, la
divina resignación... Y se me arruga el alma, siento como si se me comprimiera
el corazón, ni siquiera quiero ver las fotos o leer las conversaciones porque
me quiebro más y aunque parezca que ya no se puede, estoy segura que sí.
Desgraciadamente no puedo vivir a
base de esperanzas y sueños, estoy en este, en el mundo real, donde a la gente
no le va a importar si estás bien o mal y salen como fieras al ataque cada día
y me tengo que adaptar, tengo que dejar de ser una simple oveja ilusionada por
señales que no existen y agarrar valor para salir afuera, a la realidad donde
tienes que ser guerrero para no salir destrozado.
E.Carreras.
Pd. Ya han pasado más
de 20 días supongo que ya no hay mucho por hacer, supongo que de hoy en
adelante así serán las cosas, que me adaptare a esta nueva realidad, que dejaré
de extrañarte, supongo que uno de estos días cuando menos lo piense ya te habré
olvidado.